Fue delantero en la época dorada del “Globo” comodorense  y hoy ejerce su cargo de concejal, con la misma pasión que décadas atrás buscaba los goles para Huracán.

Fernando Husef Alí (64 años) fue sinónimo de gol. Esa raza privilegiada que posee en sus pies el pasaporte a la efímera felicidad. El delantero supo dejar una huella imborrable en Unión de Santa Fe. Gol de Unión. Gol de Alí. Siempre era así, al punto de ser aún hoy, a más de 30 años de su último partido, el máximo anotador del cuadro tatengue con 85 tantos.

Ahora intenta tener esa misma certeza y efectividad en su banca de concejal de Cambiemos en la ciudad santafesina de Santo Tomé, una actividad a la que se fue volcando de a poco: "No era un apasionado de la política, pero siempre estuve interesado en lo que pasaba en mi ciudad y mi provincia. Me di cuenta de que la manera era inmiscuirme en los temas de la gente, y desde allí, trabajar. Fue muy importante el hecho de tener un hijo que desde muy joven se involucró con la política y la convocatoria de Miguel del Sel, que me convenció de participar y ahora estoy de lleno en esto".

Con la pasión con que jugaba y encaraba a los arqueros, cuenta más de su actual actividad: "Asumí el 10 de diciembre de 2017 y tengo mandato por cuatro años con mi banca. Me gusta este desafío de estar cerca de las personas de mi ciudad".

En una nota publicada en Infobae, el exjugador recordó su paso por Huracán de Comodoro Rivadavia: "pocos recuerdan que mis comienzos fueron en San Lorenzo. Había llegado desde San Juan y al poco tiempo debuté en Primera. Fue en abril de 1974, reemplazando nada menos que al Gringo Scotta y dirigido por un maestro como Osvaldo Zubeldía. Fue como cumplir un sueño".

La superpoblación de atacantes le obligó a un forzado exilio en Comodoro Rivadavia. Sin embargo, ese paso por el fútbol patagónico, cambiaría su vida: "Tras un año a préstamo, Huracán de Comodoro Rivadavia me compró el pase. Y en aquel 1976 se armó un equipo muy competitivo, con la Pantera Rodríguez en el arco, la seguridad en defensa del Flaco Zuccarelli, el Chueco Britapaja, etcétera. Conseguimos la clasificación al Nacional donde hicimos un torneo con Oscar Cadars como entrenador, a quien contrata Unión a principios de 1977 y él me llevó para Santa Fe”.

El Turco dejó su huella con un récord que pocos pueden mostrar y él lo hace con orgullo. "En septiembre de 1978 le hice goles a tres equipos grandes en una semana. Le ganamos en Avellaneda a Racing 1-0, donde todavía atajaba Agustín Mario Cejas, cinco días más tarde tres a River en la inolvidable goleada 5-0 y 48 horas después empatamos con Boca 1-1 en cancha de Racing".