Se trata de Juan Pablo González, quien hace dos años creó una escuela para arqueros de fútbol. En la última semana el entrenador se reunió con el presidente del ente deportivo provincial, Walter Ñonquepan, para comenzar a diagramar junto al equipo de Chubut Deportes una serie de capacitaciones para jóvenes arqueros a lo largo de la provincia.

Juan Pablo Gonzalez es comdorense y encabeza la Escuela de Fútbol Infantil San Ciro, que cuenta con la presencia de más de 30 arqueritos de fútbol. Su proyecto comenzó hace años y ahora comenzará a capacitar a arqueros de la provincia, confirmaron desde Chubut Deportes.

En 2015, Juan Pablo González regresó a Comodoro tras estar fuera por casi 30 años con un objetivo: Crear la primera escuela para arqueros de fútbol de la localidad.

Menos de dos años después de su retorno, su objetivo se hizo realidad y creó la Escuela San Ciro que funciona en Alsina al 144. El salón recibe diariamente a más de 30 jóvenes arqueros separados en dos grupos: de 5 a 8 años y de 9 a 14 años.

“La escuela está abierta a todos los chicos que quieran conocer las técnicas de arquero. No importa si nunca atajaste o si ya formas parte de un club, lo importante es que quieran aprender la técnica del arquero”, explicó González, quien está acompañado por el psicólogo deportivo Carlos Villagra.

En estos últimos días el comodorense  se reunió con el presidente del ente deportivo provincial, Walter Ñonquepan, para comenzar a diagramar junto al equipo de Chubut Deportes una serie de capacitaciones para jóvenes arqueros a lo largo de la provincia.

Según González, el objetivo principal de las capacitaciones sería “trasmitirles a los chicos y entrenadores los conocimientos que uno aprendió durante mi carrera para mejorar y perfeccionar la técnica de los arqueros”.

González se recibió de director técnico de fútbol en el 2008 y tuvo la posibilidad de trabajar en el Club Estudiantes de La Plata. “Juan Ramón Verón me contactó con la gente del Club y comencé a trabajar con el coordinador del área técnica de ese momento, Leandro Cortizo. Con él aprendí todo, ya que Leandro tiene un centro de entrenamiento en La Plata; y desde que entré a Estudiantes me llevó con él. Aprendí de a poco, año a año, la técnica del arquero y sobre todo, cómo va evolucionando”.

“Al principio cuesta, porque no te conocen. Pero cuando los padres y entrenadores te ven trabajando con los chicos, cómo los tratás o los progresos que muestran los arqueros y la gente empieza a confiar en vos”, concluyó González.