Este 8 de marzo se conmemoran nueve años del fallecimiento del conocido dirigente Armando Ávila. Su gran compañera Nely Lagoria, su hija y sus nietas se acercaron al club USMA para recordarlo.

Cada 8 de marzo la familia del histórico dirigente Armando Ávila se acerca al club Unión San Martín Azcuénaga para recordarlo y hoy no fue la excepción.

Su compañera Nely Lagoria, su hija María José y sus nietas se acercaron a la institución que tanto amaba para dejar flores en la placa que Armando tiene en el club.

Hasta sus últimos días en actividad, Ávila llevó las riendas de su querido Unión San Martín Azcuénaga, club del que jamás se despegó y donde dejó obras, enseñanzas y, sobre todo, pasión por lo que hacía.

Armando también incursionó en el terreno político de la ciudad, se inició como dirigente liguista a fines de la década del 60, como secretario, hasta llegar a la presidencia de la Liga de Fútbol sobre finales de 2005, sucediendo a José Raúl Pierángeli.

Dos mandatos consecutivos tuvo en la sede madre del fútbol petrolero, hasta 2009, para convocar a las elecciones que fueron ganadas por la lista del actual titular, Antonio “Kelo” Carrizo.

En esos cuatro años al frente de la Liga, Avila representó a la Federación Patagónica ante el Consejo Federal, en 2006.

Además, en su último año como presidente, fue ternado por el Círculo de Directivos y Ex Directivos del Fútbol Argentino para el Premio Alumni 2009, que distingue a quien, por sus virtudes, se destaque entre sus pares. Se trata de una elección donde no se disputa ningún espacio de poder, sino el lugar que ocupa el premiado en el corazón de quienes lo eligen