El portugués fue sorprendido por una pequeña fanática que se metió al campo de juego para abrazarlo. Sin dudarlo, y en una gran muestra de cariño, le entregó su camiseta como devolución de su apoyo y la adolescente no pudo contener las lágrimas.

La fanática burló la seguridad y corrió hasta donde se encontraba el crack luso. La emoción fue tanta que las lágrimas se notaron cuando estaba cerca del delantero.

El hoy jugador del Manchester United se sacó rápidamente la camiseta y se la obsequió, acompañado el lindo gesto con un abrazo y ganándose el aplauso de los asistentes al Aviva Stadium.

El hecho se protagonizó tras el empate 0-0 entre Portugal e Irlanda, por el grupo A de las Eliminatorias Europeas.