La desgarradora confesión de un ex Boca tras quedar al borde de la muerte: "le toqué la puerta al diablo"
El exjugador "Xeneize" brindó detalles impactantes de su misteriosa salida del fútbol y pidió perdón en medio del drama que atraviesa.
En los últimos días, un ex futbolista con pasado en Boca realizó una entrevista donde brindó detalles del drama que atraviesa.
Se trata de Fredy Guarín, quien llegó a Boca en 2005 y formó parte de la Selección de Colombia por más de una década, disputando inclusive el Mundial de Brasil 2014.
En una entrevista con la revista Semana, Guarín habló abiertamente sobre su problema con la bebida, refiriéndose también a su corto y decepcionante ciclo con Millonarios. “Ciento por ciento. Soy alcohólico, lo reconozco y soy un adicto en recuperación. Pero aprender es de gran motivación“.
LA DRAMÁTICA CONFESIÓN DE FREDY GUARÍN
Guarin que es padre de 3 hijos, los dos primeros frutos de su relación con la venezolana Andreína Fiallo y el menor (Jacobo) con la colombiana Sara Uribe, habló sobre lo que fue su carrera como futbolista y el momento de dejar el fútbol.
"Cuando me retiro del fútbol, y más en la forma como me retiré, quedé con esa sensación de ¿qué hago ahora? ¿Qué me pongo a hacer? Lo mío fue durante 20 años entregarme al fútbol y es lo que yo sé hacer”, agregó.
“Cuando salí de Millonarios fue el punto más profundo que toqué, porque durante estos últimos tres años caí en el fondo de mi adicción. Ya no daba, había perdido mi dignidad, mi círculo social cercano, la confianza de seres queridos y lo más importante y valioso que tengo, que son mis tres hijos. Perdí muchas cosas de valor sentimental”, recordó el exfutbolista de 37 años.
“Me tocó rendirme y entregarme a mi ser superior, a unos profesionales con los que estoy trabajando para poder remediar muchas cosas. Recuperar la confianza tanto mío, como la de mis hijos, la de mis familiares. Proyectarse y aceptar, fue lo principal. No podía solo y me dejé ayudar. Estoy en ese proceso. Con toda seguridad le puedo decir que este es el definitivo. Ya le toqué la puerta al diablo y no es lo mejor”, relató Guarin.