Los jugadores se retiraron del vestuario para subirse al chárter que los llevará al aeropuerto para regresar a la Argentina y en los pasillos del Lusail entre canciones y felicidad hicieron el trencito.

En la zona mixta, todos los jugadores salieron con la Copa del Mundo y se encontraron a los periodistas en donde cantaron el infaltable: “Hay que alentar hasta la muerte”.

“Porque a Argentina yo la quiero porque es un sentimiento la llevo en el corazón, y no me importa lo que diga esos ….. periodistas…”, cantaron los jugadores.

Los festejos del micro de los campeones del Mundo: Fernet, cerveza y cumbia