El viernes por la noche, un grave incidente entre Wanda Nara y Mauro Icardi sacudió el exclusivo edificio Chateau Libertador en Buenos Aires. 

El futbolista del Galatasaray intentó reencontrarse con sus hijas, Francesca e Isabella, tras una resolución judicial que le permitía verlas después de varias semanas sin contacto. Sin embargo, la situación se descontroló rápidamente debido a un conflicto sobre las mascotas de las niñas.

El delantero llegó al colegio para recoger a sus hijas, pero se negó a llevarse a las mascotas, lo que desencadenó un enfrentamiento con Wanda Nara en el Chateau Libertador. Según testigos, Icardi ingresó al edificio sin autorización, lo que provocó un altercado con la empresaria y el personal doméstico

 egún declaraciones de Santiago Riva Roy en el programa de Ángel de Brito, "Mauro empujó a las tres empleadas de Wanda. A Wanda la tomó fuerte del brazo y a las mascotas las revoleó en el aire. Gravísimo todo". Esta información fue confirmada por Pepe Ochoa.

Salió a la luz un polémico detalle de la violenta pelea entre Wanda Nara e Icardi: "Papá me lastimó"

La situación escaló hasta el punto de requerir la intervención de la policía. Ángel de Brito mencionó que Wanda Nara, quien recientemente se sometió a una cirugía, tiene vendados los brazos y los codos, lo que generó especulaciones sobre su salud. Además, durante el incidente, Wanda pidió que se bajara a una de las niñas, lo que sugiere que no podía alzarla debido a su condición física.

En el programa, Riva Roy también reveló que uno de los policías presentes escuchó a una de las niñas decir "papá me lastimó", lo que podría ser un testimonio clave en las investigaciones posteriores. 

Tras este tenso episodio, las tres abogadas de Icardi renunciaron a su defensa, lo que complica aún más su situación legal. Wanda Nara cuenta con un botón antipánico y está preparada para tomar acciones legales contra el futbolista.