El fútbol de los martes solía ser un escape para un grupo de amigos que se reunían semanalmente para disfrutar del deporte que tanto amaban. Sin embargo, lo que comenzó como una simple actividad recreativa se convirtió en el centro de una polémica que sorprendió a todos los miembros de un grupo.

Todo comenzó cuando un joven decidió bajarse de un partido de fútbol e hizo explotar de bronca al admnistrador de un grupo de WhatsApp. Su inesperada “baja” provocó un revuelo entre los integrantes, pero fue la reacción ingeniosa del encargado de organizar los encuentros lo que realmente llamó la atención.

En un mensaje de voz que fue publicado por LMNeuquén, el organizador expresó: “Esto no es para tomito, es una reflexión de la vida”. Comparando la situación con el tenis, explicó: “Porque si martincito me dice que sí, listo, con otro ser hago un partido y simulo que soy feliz”.

El encargado continuó su reflexión: “Para jugar al fútbol, necesitamos 12 almas, 12 seres que se convoquen para simular por un rato que lo más importante de la vida es hacer más goles que el otro equipo, 12 seres para ese ratito de escaparnos de la realidad cotidiana”.

Con un tono enérgico, agregó: “Y cuando el turno se cae, vos no podés decir tan abiertamente, libremente, 'no puedo entrenar, me voy a calistenia, me chup.. un huevo'… Si se está por caer el turno, no me digas tan libremente que te vas a Calistenia porque me haces calentar. Hay alguien que se encarga de que ese evento se repita todos los martes como algo sagrado, ¿me explico?”.

La respuesta del encargado de organizar los partidos generó una mezcla de sorpresa y un polémico un debate en las redes sociales sobre la importancia de comprometerse y valorar las actividades en las que participamos