Merceditas Rojo es de Rada Tilly y trabajó como prensa en Gimnasia y Esgrima. El 20 de marzo iba a viajar a Suiza para casarse con su novio griego. Sin embargo, el coronavirus arruinó todo y ahora pide que la autoricen a viajar. “Lo que estamos pidiendo es obtener un permiso de reunificación de pareja binacional, algo que ya están aceptando en Austria, Noruega y Dinamarca pero todavía no en Suiza”, explicó.

“Estado del vuelo: cancelado. Cuando leí eso me largué a llorar, no podía parar”, admite Merceditas Rojo, una joven de Rada Tilly que el 20 de marzo iba a viajar de Suiza para casarse con su novio griego.

La historia de película fue publicada este lunes por Clarín y Merceditas, ex prensa de Gimnasia y Esgrima, contó que pidió un permiso especial para encontrarse con su novio. “Lo que estamos pidiendo es obtener un permiso de reunificación de pareja binacional, algo que ya están aceptando en Austria, Noruega y Dinamarca pero todavía no en Suiza”.

La joven conoció a Panteli Peri (31) en Buenos Aires. Era noviembre de 2018 y coincidieron en la zona de Puerto Madero a través de Tinder, una aplicación de citas. Para el hombre era un día de descanso en medio de viaje de trabajo a Uruguay. Ese día se contactaron, no se vieron y comenzaron a charlar a través de internet.

“Cuando empezamos a hablar, él ya se estaba volviendo a Suiza así que no pudimos vernos. Pero la conexión por chat fue muy fuerte. Teníamos bastante en común. Primero descubrimos que a los dos nos gustaba el básquet. Hablando con él noté que la cultura griega es muy parecida a la nuestra”, recordó ella.

Instagram y WhatsApp dieron continuidad a la relación. Mensajes, audios, fotos y la cotidianidad. Ella tenía la posibilidad de viajar a Suiza por trabajo. Sin embargo, a último momento se suspendió el viaje. Ante esa situación, el decidió tomar el toro por las astas y viajó a Argentina a conocerla.

El 16 de marzo de 2019 aterrizó en el país y concretaron el encuentro en el Aeropuerto de Ezeiza. Vivieron tres semanas a puro amor en un departamento de Palermo, viajaron a Mendoza, Cataratas del Iguazú y Chubut, donde conoció a los padres de la protagonista de esta historia.

La relación luego continuó a distancia. Ella viajó a Europa y luego todo continuó a través de llamadas y mensajes hasta que decidieron casarse para poder vivir juntos en Suiza.

El 28 de marzo era la fecha del casamiento. Iban a viajar los padres y los hermanos de Mercedita. Pero todo se suspendió por el aislamiento. "Cuando leí eso me largué a llorar, no podía parar. No soy la única en esta situación. Pero seguimos seguros de nuestro amor. Ojalá nos escuchen y pronto podamos empezar esa vida en común con la que soñamos por tanto tiempo”, señaló, esperando que pronto la autoricen a viajar.