El 24 de mayo de 2014, el arquero histórico de River Plate llegó a la capital petrolera y visitó la redacción de diario El Patagónico. En su honor se festeja el día del arquero. Hoy falleció a los 93 años .

La noticia del fallecimiento de Amadeo Carrizo golpea en un momento sensible de la Argentina por la Pandemia  del Covid-19 y porque el arquero riverplatense es muy querido por todos, sin distinción de camisetas.

Amadeo vino a Comodoro Rivadavia por primera y única vez el 24 de mayo de 2014, con 87 años, y llegó junto a su nieto. Había sido invitado en esa oportunidad por la Filial Enzo Francescoli y visitó la redacción de diario El Patagónico.

Saludó con la mano y con un beso en la recepción del diario a cada uno de los trabajadores, y se sacó fotos con todos. En ese momento reconoció que cada gesto de cariño que recibía en el interior del país, lo reconfortaba. Afirmó también que era la primera vez que visitaba Comodoro Rivadavia “porque antes nadie me invitó”.

El gran arquero nacido en Rufino un 12 de Julio falleció en Buenos Aires y sus restos serán trasladados hasta Santa Fe para descansar en su tierra natal.

En su honor, y por el día de su nacimiento se festeja el día del arquero en la Argentina. Fue en su momento un innovador al salir jugando con los pies lejos del arco.

En su visita por la capital petrolera sintió el cariño no sólo de los riverplatenses, y eso lo puso contento. “La gente es maravillosa, ese afecto que me demuestran en cada instante en la calle es muy valedero para uno. Es un placer grande que la gente te siga recordando”.

En abril del 2014 tuvo un merecido reconocimiento por parte del club  River Plate y se lo reconoció como “Lo más lindo que he recibido es que me nombren presidente honorario del club. Es una distinción muy buena. Yo me río cuando me dicen señor presidente porque me parece mentira. Es un gran halago. Lo que me hicieron en el Monumental fue algo maravilloso. Después de tantos años tuve este reconocimiento tan grato y feliz de que mi querido club me lo haya hecho. Pero pasaron muchos directivos y estuvimos un poco olvidados. Pasaron muchos jugadores que hicieron historia grande y se olvidaron de ellos", concluyó el gran arquero que dejó una huella imborrable en el fútbol argentino.