La relación entre Gian Piero Gasperini y Alejandro Papu Gómez se rompió el pasado mes de diciembre en la previa de un encuentro ante Midtjylland por la última jornada de la fase de grupos de la UEFA Champions League.

Atalanta sufrió un divorcio entre padre e hijo que dinamitó la temporada de La Dea. Casi 8 meses después, el argentino acusa al DT de haberle agredido físicamente.

En una charla con La Nación, el futbolista repasó su actualidad en LaLiga, donde llegó desde el Calcio tras defender los intereses del equipo de Bérgamo. Al ser consultado por su salida y pelea con el entrenador italiano, prendió el ventilador: “Me esperaba una disculpa del técnico que jamás llegó. Yo me equivoqué en algo, lo asumo, porque en un partido de Champions contra un equipo de Dinamarca, el Midtjylland, lo desobedecí en una indicación táctica…en el vestuario del descanso se sobrepasó, cruzó los límites e intentó agredirme físicamente".

"Ahí dije basta. Uno puede discutir, pero cuando hay una agresión física ya es intolerable. Entonces pedí una reunión con el presidente del club, Antonio Percassi, y le dije que no tenía problemas en continuar, aceptando que me había equivocado: como capitán no me había comportado bien, había sido un mal ejemplo desobedeciendo al técnico…Yo avancé y le pedí disculpas al entrenador y a mis compañeros por lo que había pasado. Y no recibí ninguna disculpa del técnico. Ahí empezó todo”, continuaba el argentino.

La Gazzetta dello Sport habló con el entrenador de Atalanta, quien contestó a las declaraciones del Papu manifestando una versión que se contradice con lo dicho por el argentino.

"Papu ha mentido. Su comportamiento dentro y fuera del campo se había vuelto inaceptable para el entrenador y para sus compañeros. La agresión física fue suya, no mía... Se fue realmente de Bérgamo porque le faltó el respeto a los dueños del club, fue el motivo", relataba Gasperini en un nuevo round con Alejandro Gómez.