Gastón Revol, capitán del equipo nacional de rugby que consiguió el bronce olímpico, fue una promesante más, como un fanático del deporte pero con la fe intacta que la llevó en su bolso a Tokio 2020 cargado de ilusiones. Ahora deberá cumplirle a la Virgen de Alta Gracia.

Los 36,8 kilómetros que separan al capitán argentino desde Córdoba hasta donde se encuentra la Virgen de Alta Gracia, de la misma localidad cordobesa, serán para cumplir la promesa tras obtención de la medalla de bronce para el capitán que no jugó por estar suspendido, ni ante Fiji y tampoco frente a Gran Bretaña.

Si bien desde la capital de la provincia a la localidad aledaña hay una distancia en auto casi 37 kilómetros, los que se transitan en casi 45 minutos, serán casi 8 horas las que el capitán del equipo nacional transitará a pie a pie y que vivió los tres partidos aparte, con una suspensión que cumple juegos por un tácame alto que cometió ante Sudáfrica.

La consagración para Argentina con la obtención de la medalla de bronce en la delegación nacional llegó como un bálsamo y fue una bocanada de esperanza en la Villa olímpica que sigue participando en diferentes disciplinas.

Mientras que ahora Revol, a su regreso a la Argentina, buscará su tiempo para agradecer en Alta Gracia y ante la Virgen por la obtención de la medalla de bronce en Tokio 2020 en nombre de él y seguramente de Los Pumas 7s.