Priscilla Appiolaza (11), en representación del club Huergo fue Subcampeona Sudamericana 2020, mientras que Pablo Cosentino 6º Dan, se adjudicó el 1er. lugar de la competencia y además sumó una medalla de plata.

Semanas atrás, tuvo lugar el 1er. Campeonato de Judo Virtual, organizado desde Brasil. Fueron poco más de doscientos judocas de diez países diferentes. Entre ellos; representando a la Argentina, estuvieron Priscilla Appiolaza (11), hija de la profesora Gilda Garnica y referente del judo de Comodoro Rivadavia, y nieta de Marcos Garnica (2° dan). Junto a ella, estuvo Pablo Cosentino, maestro de judo, cinturón blanco y rojo, y 6° Dan.

Ambos quedaron en lo más alto del Sudamericano. En el caso de Priscilla (10° kyú) llegó a preparar su primera exhibición virtual; Seiryoku Zen 'Yo Kokumin Taiiku (formas técnicas de golpes y bloqueos de judo) en la categoría infantiles Sub- 13 y se trajo la Medalla de Plata.

Desde su lado, Cosentino, se presentó con dos exhibiciones, compitiendo en la categoría de Seniors y en la muestra del Nage No Kata (30 técnicas de proyección) se quedó con el campeonato y Medalla de Oro. Mientras que en la presentación: Seiryoku Zen 'Yo Kokumin Taiiku (formas técnicas de golpes y bloqueos de judo) se adjudicó la presea de Plata.

Pablo Cosentino, maestro de judo, y 6° Dan comentó su experiencia en lo que fue el Sudamericano de Judo Virtual, organizado por la Confederación Sudamérica de Judo y expresó que “estamos muy orgullosos con Priscilla al participar del primer Campeonato Virtual Sudamericano de Judo. Por el tema de la pandemia no se pudo viajar a Brasil y se debió organizar a nivel virtual”.

Priscilla Appiolaza (11) “estuvo en la categoría Sub-13, mixta y logró en el kata, una exhibición de técnicas propias de judo logró la medalla de plata, quedando como Subcampeona Sudamericana del 2020 en técnicas de golpes, bloqueos y patadas”.

El flamante campeón Sudamericano (por tercera vez consecutiva; 2018, 2019 y 2020) contó lo que fue vivir esta nueva forma de competencia. “Siendo la primera vez que participamos de una propuesta así en judo, había que filmarse con un celular, en posición horizontal toda la exhibición que uno tenía que hacer. Junto con Gilda Garnica, quien me ayudo, asesorándome técnicamente logramos una buena filmación y logré la medalla de oro representando a la Argentina. Es un orgullo muy grande”.