Valentín Barco integra la selección juvenil y el “Xeneize” le hizo primer contrato.

"Muy feliz por haber firmado mi primer contrato profesional con Boca, que me abrió las puertas desde un principio, gracias a mi familia y amigos por bancarme en todo momento. Vamos por más. Vamos Boca". Así, con esas palabras, Valentín Barco celebró en las redes sociales el momento en el que puso el gancho a su primer contrato con Boca, como parte de una serie de firmas que encaró el Consejo de Fútbol en los últimos meses para evitar que la fuga de talentos: la particularidad de este caso es que el Colo tiene solo 16 años y justamente le ofrecieron el vínculo porque es una de las grandes promesas de la cantera.

Barco, nacido el 23 de julio del 2004 en la ciudad de 25 de Mayo, llegó a Boca desde el club Sportivo a los nueve años como delantero y enseguida se convirtió en lateral izquierdo, el puesto que hoy no duda en decir que es el que más le gusta y donde mejor se siente. Proyección, velocidad, técnica y entrega son las virtudes que hacen sobresalir al zurdo y lo llevaron a integrar las selecciones juveniles Sub 13 y Sub 15, con la que el año pasado ganó un torneo en Croacia.

Si bien ahora está en la pensión del club, los primeros tres años no fueron sencillos para el Colo, porque recorría cuatro veces por semana los 400 kilómetros ida y vuelta entre su ciudad y el club. "Había veces que no teníamos nada de plata. 'Tenemos para el gas y el peaje. Vamos y llevamos el mate', le decía yo. 'Sí, ma, vamos'. Ha ido hasta con fiebre a entrenar, vomitando en el viaje dentro de una bolsa... Fue mucho sacrificio, llegábamos a fin de año agotados pero felices", contó tiempo atrás Patricia, la madre de Valentín, al sitio web local www.convergencias.com.ar.

Un día para él era levantarse a las 6 para hacer la tarea y estudiar, a las 7.30 entraba a la escuela y entre 11.30 y 12 su mamá o su papá lo retiraban para llevarlo hasta La Candela. Se entrenaba. Y a las 18 pegaban la vuelta para llegar entre las 21 y 22 a su casa. Así, miércoles, jueves y viernes. Y los domingos repetían el viaje para los partidos. "El (Renault) 12 nos acompañó siempre, nunca nos dejó a pie", dijo el papá en la misma entrevista.

En 25 de Mayo, una ciudad de alrededor de 40.000 habitantes, siguen desde hace tiempo todos sus movimientos. Cuando fue campeón con la Sub 15 en Croacia le hicieron un gran recibimiento con camión de bomberos, caravana y participación de la peña xeneize local, y hasta lo recibió el Intendente, quien le dijo que era "un orgullo" para el pueblo. Y ahora que firmó su primer contrato, por supuesto que su nombre apareció en todos los medios de la zona.

El próximo sueño del Colo, que este año forma parte de la Séptima División que dirige Gustavo Pinto, es debutar en la Primera de Boca. "Desde chiquito siempre quise jugar", contó con timidez en un medio de su localidad. "Mi sueño es llegar a la Primera de Boca, la Selección y ganar un Mundial".

Fuente: Olé