Lucas Pardo, el nuevo refuerzo de Newbery, admite que el lunes se le hizo difícil entrenar en la playa de Rada Tilly, pero sabe que con el correr de los días se acostumbrará al frío invierno patagónico que amenaza con vientos constantes y lluvias aisladas.

Pardo el domingo llegó desde Mendoza, por tierra. Se bajó del colectivo y al otro día fue a entrenar con sus nuevos compañeros, sabiendo que debe adaptarse para ganarse un lugar en el equipo de Sergio Busciglio, el entrenador que conoció en Las Paredes y con el que se salvó del descenso en un momento complicado del club.

Es que según a PDC, cuando Busciglio llegó a ese club estaban luchando por no bajar de categoría y lo lograron. "Fue una experiencia complicada, pero en esos 5 o 6 meses que estuvimos pudimos salvar la categoría y ahí tuve un acercamiento más cercano con Sergio", recordó. 

Lucas se formó en Independiente Rivadavia de Mendoza, a donde llegó a los 9 años. Allí estuvo hasta los 17. Llegó a entrenar con el plantel profesional que por entonces disputaba la Primera B Nacional. Sin embargo, por cosas del destino dejó el club y buscó una oportunidad en el fútbol chileno, en Colo Colo. 

En el Cacique, el volante estuvo cinco meses, pero al no completar la tramitación de la doble ciudadanía tuvo que volver a tierras mendocinas, y decidió regresar al pago chico, a Las Paredes, donde comenzó su vida en el fútbol. Luego llegaría Independiente (Calle Larga) donde vivió uno de sus mejores momentos futbolísticos y salió campeón. Allí estuvo dos años, y luego pasó a Sportivo Balloffet para más tarde recalar en Deportivo Argentino, su último club.

Lucas asegura que cuando le llegó la oferta de Newbery el equipo estaba bien encaminado para luchar por el ascenso. Sin embargo, ante el ofrecimiento no dudó y se vino al sur de la Patagonia.

“Estábamos a mitad de torneo, punteros, invictos, peleando el ascenso y bien encaminados para ascender, pero recibí el llamado de Sergio, de Newbery, y fue cuestión de una semana o dos, solucionar todo y viajar lo más rápido posible. Vine con las mejores expectativas, como uno más, a dejar una buena imagen y llevar al club lo más alto posible".

Respecto a su llegada Pardo, asegura que la idea es jugar el torneo local para adaptarse al fútbol de Comodoro y luego pensar en el Regional. "Eso es lo que hablé con los dirigentes. Primero la idea era venir para el Torneo Regional, pero comunicándome con Sergio y otros dirigentes del club, se decidió que lo mejor era venir lo antes posible para adaptarme a la liga local y llegar de la mejor manera al Torneo Regional".

El volante mixto, asegura que se puede adaptar a cualquier posición del mediocampo, y que alguna vez jugó de mediopunta y también delantero. Con 1.80 de altura, admite que el Regional "es un salto de categoría". Por eso no duda en afirmar que viene "a dar lo mejor y dejar una linda huella".