Boca vive días de tensión, y la relación no es la mejor. Principalmente con dos jugadores: Darío Benedetto y Carlos Izquierdoz.

Y es que el estallido comenzó un día antes del partido más trascendental en el semestre de Boca, ante Corinthians. Los jugadores reclamaron los premios y amenazaron con no concentrarse. Sin embargo, la bomba fue en el clásico ante San Lorenzo. Carlos Izquierdoz, una de los voces en el vestuario, quedó totalmente marginado y su salida está cada vez más cerca.

No fue casualidad que, en el 1-0 inicial de Boca (luego perdió 2-1) Marcos Rojo festejara con la cinta de capitán, además de darle apoyo y un abrazo a Izuiqerdoz. Su compañero de zaga, que fue quién fue relegado. Fue el mismo Cali quién fue la voz de mando en ese reclamo colectivo de premios.

El central de 33 años dialogó con Jorge Bermúdez y Raúl Cascini por el atraso en el pago de los premios correspondiente a la presente temporada. Sin embargo de dialogó pasó a discusión, la cual el Consejo de Fútbol consideró inoportuna. Por eso la decisión de marginar a Izquierdoz.