“He recibido amenazas de muerte”, dijo uno de los empleados que posó junto a Maradona
Claudio Fernández fue uno de los tres trabajadores que se fotografió con el cuerpo de Diego Maradona antes de que sea despedido en Casa Rosada. “Pido perdón a todos”, remarcó tras la viralización de la imagen.
Durante el jueves se han vuelto virales por medio de las diversas redes sociales dos fotos en las que aparecía Diego Maradona a cajón abierto. De inmediato las imágenes generaron indignación y repudio. Claudio Fernández fue uno de los implicados brindó declaraciones radiales y pidió “respeto y perdón para todos”.
“Estábamos acomodando antes de llevarlo, y mi hijo, como todo pibe, levantó el pulgar y sacaron la foto. Pido respeto y perdón a todos. Mirá que hice servicio al papá de Maradona, al cuñado. Estuve con Maradona en vida cerca, no lo hice en vida siendo mi ídolo, no lo voy a hacer de fallecido. No es mi intención. Sé que mucha gente se ha ofendido, lo han tomado mal, sé que molestó”, dijo.
Y agregó: “En ese momento estaba pensando, con los nervios de que quede bien Maradona. Si vos ves la foto, justo levanté la cabeza porque me dijeron: ‘Flaco’. Fue algo instantáneo. Soy de las personas que no piensan en sacar fotos con féretros y fallecidos, por respeto“.
Después de la viralización de la imagen, el hombre explicó: "He recibido amenazas. Soy de barrio, me conocen. Me dicen que me van a matar, que me van a romper la camioneta, amenazan a mis hijos, y no soy de esa clase de personas. Esa foto no fue sacada de mi teléfono, la sacaron de otro, eso es lo peor de todo. Jamás pensé que la iban a subir o que la iban a pasar a un grupo o viralizar. Le pido disculpas a la familia Maradona”.
Asimismo, el hombre que trabaja desde hace más de siete años con Pinier manejando el coche fúnebre y preparando los cadáveres antes de los velorios, apartó a la empresa del escándalo. “Tampoco tienen la culpa ellos. Les saco responsabilidad. Pinier ya trabajó con la familia Maradona y Villafañe. Jamás hemos tenido ningún problema, pero bueno”, expresó. César Picón, dueño junto a sus hermanos Diego y Matías de la casa velatoria aclaró que los implicados en el hecho “fueron contratados para colaborar con el sepelio”.
Fuente: Radio Mitre