"Me divierte...": Riquelme rompió el silencio y dio la cara tras la eliminación de Boca en la Copa Argentina

Tras la dolorosa derrota por 4-3 ante Vélez Sarsfield en las semifinales de la Copa Argentina, el presidente de Boca Juniors, Juan Román Riquelme, decidió dar la cara y analizar la actuación del equipo.

Riquelme comenzó señalando que, a pesar del "mal trago" de la eliminación, le "divierte venir" a la provincia donde la gente le da "cariño a los jugadores". Reconoció que "teníamos la ilusión de llegar a la final y no se pudo".

Sobre el partido en sí, el dirigente xeneize admitió que "fue un partido divertido para el que no es hincha de Vélez o de Boca" y que "la suerte jugó del lado de ellos". Analizó que "hubo muchos errores" de Boca, pero destacó que "el equipo compitió" y "tuvo vergüenza".

"Fuimos semifinalistas de la Copa Argentina, también del torneo pasado, hoy tuvimos algunos errores, pero el equipo compitió, tuvo vergüenza", señaló Riquelme, defendiendo la actuación del equipo a pesar de la eliminación.

Riquelme se hizo cargo de que este torneo largo "no lo hicimos bien", pero remarcó que "el primer semestre fue bueno, no fue malo". Sobre la expulsión de Advíncula, el dirigente xeneize señaló que "nadie se hace expulsar porque quiere" y que "son cosas que pasan" en el fútbol.

Riquelme hizo un llamado a la unidad, pidiendo a la gente que "entienda que esto es deporte". Afirmó que el equipo tiene que "dar el presente contra Gimnasia" y terminar lo más alto posible en el campeonato, señalando que "necesitamos competir cada partido".

El dirigente xeneize también lanzó un palito a terceros, al señalar que "yo no escucho que hablen que todos los equipos tienen que ir a la Libertadores. Nosotros tenemos la obligación de jugarla todos los años".

Riquelme reconoció que tiene "autocrítica" y que se "hace cargo que este torneo largo no lo hicimos bien". Sin embargo, remarcó que "el primer semestre fue bueno" y que si Boca es semifinalista y no pasa, "es fracaso".

Con un tono conciliador, Riquelme buscó cerrar filas en torno al equipo y pidió a la hinchada que esté "todos juntos" para afrontar los próximos desafíos. La eliminación de la Copa Argentina sin duda es un duro golpe para Boca, pero el presidente xeneize intentó mantener la calma y poner la mirada en lo que viene.