El gol de Maradona a Inglaterra, Malvinas y la profesión ante todo
El fotógrafo de la recordada revista El Gráfico recorrió de punta a punta cómo fue la cobertura de la Copa del Mundo de México 1986, que tuvo como punto cúlmine la consagración ante Alemania, aunque para él fuera la actuación de Diego ante Inglaterra. “Yo les quería ganar, estuve 52 días en el sur por Malvinas”, reconoció este invitado de PDC.
“Marcelo vamos a ver un pendejo de 16 años que la rompe”, fue la frase de un periodista de Revista El Gráfico en 1976, antes que el mundo conociera a Diego Armando Maradona.
De ahí en más, Figueras ya sabía quién era "Pelusa" al igual que el público argentino, aunque el Mundo descubriría por completo su zurda en la Copa sobre territorio mexicano, con actuaciones consagratorias e inolvidables como ante Inglaterra, Bélgica y Alemania.
“Me dicen tenés que ir al Mundial de México, voy que se yo. Contento porque la Copa es una cosa interesante y linda. Éramos cuatro fotógrafos en el Distrito Federal”, indicó Marcelo Figueras, uno de los integrantes del equipo de El Gráfico que también tenían al periodista Daniel Arcucci, ex La Nación y hoy en ESPN.
Fútbol, trabajo y "bilardismo"
“Cuando vamos al partido con Inglaterra teníamos nuestra cábalas. La misma ropa, el asiento en el auto, parece mentira pero era muy cierto y cuando iba a la cancha tenía que sentarme al lado de los mismos tipos que tenían asiento fijo que eran un francés y un rengo en muletas” ”, rompe el hielo Figueras.
El fotógrafo contó que su sector en la cancha era la platea, pues su función en cuanto al resto del equipo era “resguardar a los compañeros de abajo que trabajan sobre el piso y no te podes perder nada de nada”.
“Aunque gatilles de más no importaba y cada vez que pasaba la pelota de mitad de cancha empezar a apretar y no como ahora que tenés el foco con el puntito rojo y el motorcito, eso era manual, enfoque y disparo manual. Después medir la luz porque era “diapo”, no era negativo y si vos medías mal el color te salía negro o blanco”, recuerda este hombre que a los 80 años sigue disfrutando de su pasión y profesión como lo es el fotoperiodismo y que nació desde una curiosidad y que sus primeros pasos fueron desde lo social en Avellaneda.
“Había cierta intuición en algo. Ese día, le dan la pelota al (Héctor) "Negro" Enrique, pisa la pelota y se la da Diego, él hace un giro invertido como en el básquet, pica y cuando cruza la mitad de la cancha yo iba haciendo foto y digo esto me parece que va a ser gol. Te lo juro que así fue. Foto, foto y atrás mío tenía dividida a la platea por un alambrado y habían ingleses”, recordó.
La alegría cara a cara con el rival y Malvinas
“Gol de Diego y veo que él sale gritando no para el lado de la platea donde estaba yo, sino para el otro lado y pensé que el festejo lo hagan los de abajo. Sabía que tenía la secuencia. Tenía una sensación de triunfo, porque yo había estado 52 días en el sur por el tema de Malvinas y les quería ganar”, recuerda Figueras.
“A mí que no me digan que no mezcle el deporte con la política y quería ganarle. Me di vuelta los miré a estos tipos y les grité el gol como si fuera un gol del campeonato de Racing. Me salió del alma, se me caían las lágrimas; no sabes lo que era y la gente y el griterío y se juntaba todo”, rememora a 34 años de uno de los goles más memorables de la historia del fútbol.
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La alegría infinita, el gol ¿y la foto?
El fotoperiodista remarcó que el post partido fue un “mar de lágrimas en el sector de prensa. Emoción pero no de dolor”.
“Viene (Julio César) Pascuatto (NdR: Juvenal) viene y me dice ¿Tenés el gol?. Le digo Julio, sino tengo este gol tengo que mandar este telegrama de acá de México a Editorial Atlántida que no regreso nunca más a mi país. Tengo 16 imágenes de este gol, sabía que la tenía y encima en foco”, recuerda Figueras a Pasta de Campeón entre el éxtasis y la alegría pero con el deber cumplido a casi 7400 kilómetros.
Sin embargo, este hoy hombre alejado del fútbol y más cerca del básquet reconoció que su lente capturó el gol de Maradona con la mano a Inglaterra.
“No fue lo más grande que hice yo, no, porque después tengo el gol con la mano y en ese momento no le daban pelota. Si a ese gol el segundo, que fue una obra maestra de este pibe. Aunque luego el primero pasó a la historia, pero todo lo demás fue tapado por este gol”, cerró un testigo privilegiado en México, a 34 años de esta gesta deportiva, la cual se entremezcló con lo sociopolítico, en los comienzos de la democracia argentina.
Reviví la entrevista completa de PDC junto a Marcelo Figueras
