El ingreso de Marcos Acuña en la mitad de la cancha le dio el equilibrio que el equipo de Scaloni necesitaba en la mitad de la cancha.
Argentina venció a Venezuela esta tarde por 2 a 0 y accedió a la semifinal de la Copa América. Ahora, tendrá en frente nada más ni nada menos que al anfitrión de esta competencia: Brasil.
El seleccionado argentino viene de menor a mayor en este torneo y, sin dudas, uno de los puntos altos del equipo es Marcos Acuña. El volante neuquino le dio equilibrio al triángulo que forma Scaloni en la mitad de la cancha. Tanto él como De Paul se convirtieron en armas fundamentales para que Leandro Paredes esté bien rodeado en su recorrido de contención y de esta manera se pueda lucir como uno de los mejores en lo que va la Copa América.
De mitos y mitómanos
Quizás no sea el más vistoso, pero el ingreso de Acuña en los 11 iniciales potenció a Paredes y también a Tagliafico quien se siente más seguro en la ofensiva y en lo defensivo, ya que el “Huevo” le cubre las espaldas con los relevos.
Ahora, los de Scaloni tendrán un durísimo encuentro. El martes, desde las 21:30 horas, el país se paralizará para ver el duelo ante el seleccionado brasiliero que viene de dejar en el camino a Paraguay por penales.
