Este fin de semana Germinal debía jugar en divisiones inferiores ante La Rivera. Sin embargo, tomó la determinación de no presentar a sus equipos de inferiores para preservarlos de insultos y agravios de adultos.

Una alarma que se enciende en la Liga del Valle en divisiones inferiores y en el fútbol de primera división. Este fin de semana el club Germinal determinó no presentar a sus equipos de divisiones inferiores para preservarlos de las agresiones e insultos de adultos en los campos de juegos.

A principio de mes, por la problemática que viven, las instituciones tomaron medidas en conjunto . En cancha de Los Aromos Germinal tomaron la iniciativa y junto a Defensores del Parque desplegaron una bandera, haciendo referencia a la situación de bullying y violencia en los clubes.

Germinal no presentó a su equipo de inferiores para que sus jugadores no sufran agresiones

En esa oportunidad, Pedro Bravo González  presidente de Germinal, expresó, ”tenemos que ponernos firmes con el tema del bullying y la violencia. Cada uno desde nuestro club debemos trabajar internamente tanto con los jugadores como entrenadores, e incluso con psicólogos y poder llegar a los padres con un mensaje claro. Además nosotros lo vamos a hacer con todas las actividades, no solo el fútbol”.

Del mismo modo, que determinaron no jugar con las divisiones inferiores de su institución. Al parecer, el reclamo de Germinal parte de la decisión de padres, técnicos y profesores del club, y también de los jóvenes que habrían recibido a través de redes sociales, algún tipo de agravio.

Al respecto, el club Germinal presentó una nota a la Liga del Valle, y en uno de sus párrafos, expresa, “El motivo que fundamenta la toma de esta decisión son los acontecimientos que vienen ocurriendo en varios encuentros, donde los niños recibieron insultos y agresiones verbales, y no podemos permitir que eso suceda", publicó Canal 12 Web.

Por lo que la liga valletana deberá tomar las medidas del caso, expedirse a través del  tribunal de disciplina, que constituye un hecho muy grave que definitivamente debe erradicarse no sólo de los campos de juego sino de cualquier tipo de evento.