Los fines de semana usa antifaz, es héroe de los nenes de Newbery y el lunes es pastelero y maestro de las medialunas
Una veta familiar que encontró durante su paso por Chile y que explotó en Comodoro Rivadavia con un emprendimiento propio. Un defensor con el timing para defender la zaga, con la misma templanza a la hora de su trabajo en el taller pastelero y la cocina.
Los sábados o domingos donde le toca jugar se hizo referencia para que los chicos que lo ven con una máscara -como antifaz- le pidan fotos y un simple saludo antes de que entre a la cancha, mientras que en la semana trabaja con un emprendimiento familiar entre batidoras, hornos, fuentes, mangas, cremas y rellenos que son conocidos por un público que disfruta de dichas exquisiteces.
Germán Martínez, el Colito, o el “Colo” con el paso del tiempo que llegó a Jorge Newbery tras jugar para la Comisión de Actividades Infantiles, cuando tras la pandemia entre 2020 y por el coronavirus lo tuvo en Deportivo Linares en Chile con una apuesta de su compañera Sofía.
El hoy defensor del “Lobo” es parte del equipo de Matías Tatangelo y anteriormente con Hugo Barrientos, ciclo donde una lesión hizo que la zaga lo extrañe por una durísima fractura en su cara que lo llevó a tener una protección.
Lo que para muchos es un protector facial, para niños y niñas que van a ver a Jorge Newbery, es un personaje pintoresco donde los pequeños no sólo que lo siguen, sino que al defensor le piden fotografías, firmas en camisetas y hasta botines y donde el domingo fue parte del once del “Aeronauta” que venció en el clásico de Comodoro a Huracán.
Sin embargo, la dureza como defensor en la última línea del “Lobo”, puntero del Oficial Apertura 2024 de la Liga de Fútbol de Comodoro Rivadavia y tras dejar la máscara como antifaz de superhéroe, Martínez comparte pequeños ratos donde los niños le piden el protector facial para que se puedan tomar una foto y además firma camisetas, como algunos botines.
El propio Martínez de la mejor manera comparte esos instantes con los niños y rememora sus épocas de infancia, cuando su padre Hernán era entrenador de Jorge Newbery allá por comienzo del 2000 y el hoy marcador central acompañaba a los jugadores de esa época.
El lunes a la guarida del superhéroe
El taller de pastelería o la cocina es el otro lugar donde Germán Martínez continúa con las labores por fuera del césped y la pelota: se calza el delantal y se transforma en un maestro pastelero de un emprendimiento familiar.
El “Colo” trabaja en SurrSweet, la firma que fundaron junto a su compañera de vida, Sofía, donde elaboran tortas, tartas, cheesecakes y las pedidas medialunas.
El jugador de fútbol le pone sus manos, pero también su voz y cara a diferentes tutoriales en las redes sociales donde cuenta parte del trabajo diario con él en primera persona y también de la propia maestra pastelera en acción con decoración y grandes preparaciones que se venden en Comodoro Rivadavia y alrededores.
Uno de los momentos particulares de las labores en el “taller” lo tienen al “Colo” donde muestra paso a paso cómo se elaboran las medialunas, con el armado minucioso de la masa con las cantidades, el amasado y el posterior armado y que espera por la leudada final para la cocción en los hornos y la colocación del almíbar.
Un día en la pastelería que comienza muchas veces a las 06:30, en otros a las 07:30 donde entre mates, música, armados de las facturas -que suman por mes unas 1500 a 1700 unidades por mes- rellenas de dulce de leche o simples, las que el propio jugador del “Lobo” le da el último toque con el baño de almíbar con el que ya saldrán las deliciosas facturas para los clientes.
De la cancha a la pastelería y siempre con una sonrisa, Germán Martínez disfruta de su pasión en un campo de fútbol y ahora también en la cocina como artesano de las medialunas para un emprendimiento familiar, donde pone junto a su compañera Sofía, con la misma garra y pasión con la que salta a rechazar una pelota y a dejar su arco en cero, como desde que eligió ser jugador de fútbol.