Un profesor aprovechó el fenómeno de la Scaloneta para lograr algo que muchos colegas añoran: que los alumnos presten atención.

El creador de esta ocurrente herramienta pedagógica es Amadeo Laguens, un docente cordobés de Filosofía que da clases en escuelas secundarias y en terciarios. En uno de sus dictados, el magistrado escribió en el pizarrón: “El que habla, odia a la Scaloneta”.

Además el profesor, aseguró no gustarle fútbol “para nada” y dijo: “los chicos más revoltosos, a los que más cuesta calmar, hicieron silencio”.

Uno de los estudiantes del último año de una escuela privada capturó una imagen de la frase y el momento en el que el docente parece estar explicando algo ante la atenta mirada de los alumnos. “Son adolescentes, son divinos, muy divertidos, un grupo hermoso. Siempre para calmarlos y empezar la clase busco formas de acercarme a ellos, de comunicarme”, explicó Amadeo a TN.