Elisa Alvarado es la directora técnica de Roca y recientemente fue mamá de una hermosa bebé. Zoe nació el 6 de agosto, luego de que la entrenadora le pidió al médico cambiar la fecha de parto para acompañar a sus jugadoras. “Yo quería estar con las chicas, no dejarlas solas”, dijo en diálogo con Pasta de Campeón. Ahora la DT se prepara para volver al costado de la línea de cal.

“Yo anduve todo el embarazo en la cancha prácticamente”, dice Elisa Alvarado a Pasta de Campeón al confirmar que está siendo reemplazada al frente del cuerpo técnico de Roca por haber sido mamá recientemente.

La entrenadora, impulsora del fútbol femenino en el General, el último 6 de agosto fue mamá de Zoe Martina Parra, una hermosa nena que tenía fecha de parto el mismo día en que el fútbol femenino hacia su debut oficial en Comodoro.

Elisa lo sabía y de antemano le pidió a su médico postergar el día para que pueda acompañar a sus chicas en ese histórico momento. “Tuve que planificar todo para estar en la primera fecha. Ese día estaba con contracciones pero estaba medicada y me reprogramaron para el martes. Yo quería estar con las chicas, no dejarlas solas, por suerte salió todo bien”, contó a PDC.

La entrenadora admite que estas son las dificultades que tienen las mujeres en el fútbol. Asegura que hay momentos que se complica y que incluso a veces las mismas jugadoras deben pasar por este proceso, algo natural de la vida y maravilloso.

“Una por ahí tiene planes y después tenés que acomodar todo. Yo no solamente tengo a las chicas de fútbol 11 sino que también tengo a juveniles, cadetes, preinfantiles y el equipo competitivo que está en la B del oficial, así que seguimos trabajando con todo eso”, contó.

Elisa espera poder a incorporarse a su equipo en las próximas semanas, combinando la responsabilidad de ser madre con su labor con el fútbol. Mientras tanto, analiza si podrá acompañar a sus jugadoras en la instancia provincial de los Juegos Evita, donde representarán a Comodoro.

Pero para ese momento todavía falta. Ahora es tiempo de pañales, teta y mamadera. Mucho amor y sobre todo contención. Total, al otro lado de la linea de cal tiene su puesto bien cuidado, con su marido como ayudante de campo y Gustavo Velázquez, entrenador de la 7ma, al frente del equipo.