Angelina Licastro se toma todo con alegría, primero porque fue descubierta por un seleccionador nacional, y si bien venía de lograr en el 2021 en Araucanía  (La Pampa), bronce en equipo y en la individual 12º. Y en EPADE, bronce en el medallero y cuartas en la competencia por equipo por puntos, lo que le sucede en la actualidad no se lo había imaginado, es todo muy rápido.

“Seguí con triatlón creo hasta los 16 años. Y me concentré con ciclismo cuando comencé con los Juegos de la Araucanía y los Juegos EPADE, me comenzó a gustar más la bici, a dedicarle más a la bici. Sí seguía con los triatlones y los duatlones, hasta que luego me dediqué a la bici a full”.

“Conocí a Daniel Capella, es el director del seleccionado argentino de ciclismo, fue en Chile en los Juegos de la Araucanía. Me contactó y me dijo que me veía buena para la pista. Me invitó a ir a la pista en el mes de diciembre del año pasado, si quería probar, después los convencí a mi mamá y mi papá. Fue una locura, me fui a Santa Fe (Rafaela) tres días antes de navidad, me encantó, lo disfruté. Luego me dijo Daniel Capella que volviera en enero si quería. Y volví, me quedé como cinco meses”, cuenta Angelina Licastro.

“Vengo del Panamericano de Paraguay”

 En todo este proceso también se daba el Argentino de Ruta, quedando Angelina séptima en la contra reloj.

“En el 2022, en Araucanía en Chile, quedamos quintas, no logramos hacer podio. Después 2023, en el argentino en Ruta (primer argentino), fue una contrarreloj muy buena con lindos tiempos a nivel nacional, con un 7º puesto de 25.

 En el pelotón me bajé, por el calor, estaba muy mal físicamente. Después vino la concentración para la pista, era lo que estaba preparando. Me preparé dos meses y quedé para el selectivo argentino, es muy loco todo esto. Ahora hace un mes que vengo del Panamericano de Paraguay, fue hermoso. Nos fue bien, son muchas pruebas, la que yo quería era la persecución y la cuarteta, la persecución es individual y la cuarteta es grupal. En la persecución donde quería largar, supuestamente eran tres, pero los directores decidieron que eran dos, entonces compitieron dos amigas que tenían un poquito más de experiencia. Y en la cuarteta quedamos cuartas, peleando el bronce, nos ganaron las mexicanas, en el medallero quedamos segundos”.

“Fue una tremenda experiencia, la pasé muy lindo, disfruté, conocí gente, no lo podía creer. En los Juegos Araucanía o EPADE nunca pude llegar al podio, sí siempre muy cerca. Ahora, viene el argentino en Pista en San Juan en octubre, hicieron una pista techada. Ahora en agosto me voy a Santa Fe, a Rafaela, siempre con el apoyo de Comodoro Deportes, por eso estuvimos hablando con el profe Hernán Martínez. Estamos muy agradecidos por la ayuda”, expresa Angelina Licastro.

“Corrí y salí cuarta con un cacharro de fierro”

En agosto espera concentrar en Rafaela, se quedará unos dos meses para luego competir en el Argentino de Pista. “Quiero ver si puedo correr la puntuable, seremos unas diez chicas de cada provincia. Son 80 vueltas, cada dos vueltas es un sprint, es por puntos, después la persecución (8 vueltas), quiero correrla para saber cómo estoy. Y la cuarteta, serán 4 chicas y 12 vueltas”.

 “Pero no tengo bici de pista, me presta una Daniel Capella, quien promociona a Rower que es una marca argentina de San Luis. Ellos me armaron la de pista, es una bici de piñón fijo, no tiene frenos, es otro mundo la pista. Bici de ruta si tengo hace como cinco años, es una treck madone. Soy afortunada porque me prestan una bici. No voy a mentir, cuando estuve en el selectivo estaba con un cacharro de fierro –sonrisas-. Así y todo logré un cuarto puesto, los técnicos no lo podían creer, todos estaban con bici tapada, bici de carbono. Y para colmo tenía una rueda que no estaba bien inflada, estaba recontenta”, dimensiona Angelina Licastro.

 Hoy, el barrio Juan XXIII tiene una atleta integrando la selección argentina de ciclismo en pista, Angelina Licastro confiesa que todo pasó muy rápido.  “No lo podía creer hasta que pasa toda la secuencia. Vivo con mi abuelita de parte de mi mamá. Estoy muy feliz, aunque ella me extra mucho cuando no estoy en Comodoro”.