Un episodio espeluznante se dio hoy en el Torneo Federal A en el partido que protagonizaron Huracán Las Heras y Ferro de General Pico, que debió ser suspendido cuando el equipo de Mendoza ganaba 3-1.

Todo comenzó promediando el segundo tiempo, cuando Huracán (LH), ya sin chances de clasificarse al reducido para pelear por el segundo ascenso, le ganaba 3-1 a Ferro (GP), que si se jugaba la posibilidad de jugar por un lugar en Primera Nacional.

A los 33 minutos del complemento, después del tercer gol del equipo local, el árbitro Pablo Núñez detuvo el partido porque se empezaron a ver corridas y disturbios en la popular de Huracán. Segundos después, se escucharon disparos que salieron desde ese sector hacia el campo de juego: uno de los tiros impactó a Mauricio Romero, el entrenador de Ferro en el hombro.

De inmediato, los jugadores, árbitros y todos los que estaban en el campo de juego comenzaron a correr de manera desesperada hacia la zona de vestuarios, donde tuvieron que quedarse resguardados por un rato. Allí lo atendieron a Romero -ex defensor de Lanús, Colón y Gimnasia, entre otros- que afortunadamente no tuvo una herida de gravedad ni mucho menos.

El partido quedó suspendido y será el Tribunal de disciplina de la AFA el que determine la sanción para el club local.