Dí María reveló la escalofriante amenaza de muerte que le impidió volver a la Argentina: "Era una caja con.."
El futbolista campeón del mundo contó la verdad de su fallido regreso a Rosario Central y se defendió de los insultos con una dura confesión.
Este martes, Ángel Di María rompió el silencio y reveló el verdadero motivo por el que decidió no volver a Rosario Central.
A raíz de los insultos de los hinchas canallas, el futbolista campeón del mundo brindó detalles de la escalofriante amenaza de muerte que sufrió su familia en la ciudad santafecina.
El delantero de 36 años se refirió a esta situación y declaró en diálogo con Rosario 3. “Lo dije porque es lo que siempre quise y el sueño de siempre es querer volver a jugar en Central y retirarme con esta camiseta. Y es más que obvio que voy a seguir diciéndolo cada vez que me pregunten, porque es lo que siento y siempre soñé. Y era el momento justo después de decirle adiós a la Selección, pero no se dio.
“A veces todo parece muy lindo hasta que pasan cosas como las que me pasaron a mí y a mi familia. Y me siento mal por no poder cumplir ese sueño, era algo que deseaba mucho, pero las amenazas fueron más fuertes y mi decisión siempre es basada en la tranquilidad y felicidad de mi familia” agregó el autor del segundo gol de la final del mundo ante Francia.
Como si fuera poco, Di María reveló que mantuvo conversaciones con Gonzalo Belloso, presidente de Rosario Central, y le expresó su malestar por el giro que estaba tomando su vuelta en la ciudad: “Me acuerdo que días después me escribe Gonzalo Belloso y me pregunta cómo estaba, cómo estaba mi familia. Y le dije ´para la mierda´. Yo no voy a volver a Rosario de esta manera. Tocaron a mi familia y eso sí que no lo voy a permitir. A cualquier precio no. Pasó el tiempo y volví hablar con Gonzalo, que fue en mayo, y le dije que no volvía, que no iba a poder estar tranquilo sabiendo que en cualquier momento podía pasar algo, que para muchos Central está primero, pero para mí no, para mí primero está mi familia, le pese a quien le pese”.
“Hubo una amenaza en el barrio de mis papás. Que salió en todos lados, y simultáneamente hubo otra amenaza en la inmobiliaria de mi hermana que no salió a la luz porque mi hermana y mi cuñado se asustaron y no denunciaron”, explicó primero.
Y luego relató los espantosos detalles: “Era una caja con una cabeza de chancho y una bala en la frente, y una nota que decía que, si yo volvía a Central, la próxima cabeza era la de mi hija Pía. También nombraban a Bullrich y Pullaro, que querían que se vayan”.
Quién debutó en Rosario Central en 2005 comentó lo avanzado que estaba su mudanza a la ciudad santafesina: “Mi mujer estuvo todo el año metida a full para terminar y amueblar la casa, para hacer todo lo que es la mudanza, había anotado las nenas en la escuela, se encargó de todo para que yo no hiciera nada, y las nenas contaban los días para venir a vivir con sus abuelos. La decisión la tomé yo después de que pasó la primera amenaza. Estaba en Estados Unidos con la Selección y ahí dije que era imposible volver, eso fue el 25 de marzo”.