El "Halcón" multifunción: Es de Comodoro, surgió en USMA y en Defensa y Justicia sueña con Primera

Más de un metro ochenta y cinco de estatura, una voz ya grave y un biotipo de un adulto, así se presenta el protagonista de una historia en la que Pasta de Campeón descubrió sin querer allá por 2021. Una gira de Unión San Martín Azcuénaga por Buenos Aires, en la que disputó una serie de amistosos y donde Racing sería el último partido para luego contar con la posibilidad de regresar. Sin embargo, los sueños y anhelos de desarrollo estuvieron en Florencio Varela con Defensa y Justicia que cobijó a Juan López de Murillas.

Este comodorense que PDC conoció junto a su profe Abdul Acosta vive con su familia en Buenos Aires donde narró una historia en la que agradece al “Patricio” por permitirle jugar e ir a luchar por el sueño de ser jugador de fútbol profesional hoy en el club del sur bonaerense. Hace tres años atrás, Vélez lo rechazó por su cuerpo pequeño, pero en Huracán, Defensa y Racing mostró su valía y se fijaron en el para quedarse con el “Halcón”.

A los 13 años cuando llegó a Buenos Aires y con una adaptación en camino, López De Munillas le dice a PDC que: "que me vino bien porque en esta ciudad a tan corta edad, es mejor acompañado de la familia. Es un vínculo donde te podés forjar de mejor manera y creo que te viene muy bien y es otra la experiencia". 

"EL PUNTO DE INFLEXIÓN", UNA GIRA PARA ROCE CON URUGUAYOS Y BRAISLEÑOS

“Juani” tuvo un guiño del destino que él supo aprovechar cuando pensaba que tendría que buscar otro club. Un torneo en Uruguay, donde fue citado por Jorge Galleguillo -donde el comodorense de 16 años entraba por la ventana- le dio el empujón para hoy ser puntal de la zaga que este fin de semana visitará a Independiente en Villa Domínico.

"El DT me probó de número dos, me bajó y probó de central, donde yo no me veía. Lo hablé con él y me dieron la confianza y hasta me aclararon que ellos pensaban que era mi puesto", aseguró.

"En Uruguay entré los últimos y la verdad que fue con confianza. Era un momento para demostrar y poder asentarme más en el equipo. Me fue bien, pude sumar experiencia en el exterior contra clubes de otros países donde el roce es distinto como los brasileros muy físicos, los uruguayos que hasta el final pelean la pelota y la verdad que tenés que estar atento a todo el partido", agregó.

El hoy defensor valora el aprendizaje que le dejó la gira, luego de pasar por varias posiciones en la cancha, acompañado del cambio de su cuerpo y con la habilidad que supo desarrollar.

"Yo comencé siendo enganche, pasé como lateral derecho, luego de mediocampista central", indicó el jugador, el cual sufrió cambios de lugares en cancha mientras su cuerpo fue cambiando a fuerza de trabajo y crecimiento y con el cual su entrenador le encontró su posición. 

"El físico y la altura me cambiaron y cuento con un poco salida, pero que todavía tenía que ganar marca y agresividad, o sea, roce y juego", definió.

CAMBIAR LA CABEZA Y LA NUEVA POSICIÓN

"Ya no estoy más en el medio. fue tan rápido que yo pensé acá tengo que jugar, así o así. Aunque cada tanto veo y digo, ya no soy más el mediocampista, como a veces de abajo quiero trasladar un poco de más, o tener un poco la pelota, y eso es complicado", se sonríe y le brillan los ojos con la inocencia de su juventud. 

“Obviamente sé que capaz me tengo que concentrar más en la marca o en tener un poco más de roce y chocar más al delantero centro, en vez de querer gambetear al 5 o al 10 que venga. Y también cambiar toda la dinámica de tu juego, ser otro jugador donde capaz seas más defensivo que ofensivo", aseguró.

López de Munilla hoy es "seis", valora el trabajo en la nutrición, el gimnasio y la labor que hace en el club y donde "cuantas más opciones conozca, le puedo dar opciones en cancha al profe, son más las oportunidades de jugar con las que cuento".

LOS SUEÑOS, LOS CAMPEONES DEL MUNDO Y EL TRABAJO SILENCIOSO PARA FORMARSE 

Defensa y Justicia es un club que en los últimos años tuvo un gran desarrollo no sólo en los futbolístico con títulos, contó con Enzo Fernández y Lisandro Martínez, hoy Campeones del Mundo, pero también con un predio e instalaciones de nivel europeo.

“La verdad que es una locura el club, es una familia. Yo creo que -como una vez el capitán de la reserva Andrés Berizovsky- que debutó hace poco en Primera que Defensa trabaja para el club y para los jugadores”, aseguró.

“Un día tenés una planta nueva, al otro la ducha está arreglada, un nuevo cartel donde te indica diferentes lugares y la verdad que yo creo que trabajan por y para el club. Eso se nota y hay amor para la institución”, indicó.

El "sentido de pertenencia" es lo que López de Munillas valora y afirma que en el día a día se percibe.

"Yo creo que por la forma en que te tratan nunca te hacen sentir mal. Desde que llegas al club la gente te recibe de la mejor manera, teniendo en cuenta que es un club profesional, de Primera División y la competencia va a estar porque cada uno quiere llegar y tiene sus objetivos en común", indicó el jugador ex USMA y que dio sus primeros pasos en Oeste Jrs.

"Hay un lindo grupo, sobre todo hablando en parte de mi categoría, donde nos apoyamos entre todos, pero obviamente eso no quita la competencia y el ambiente en algunos momentos tenso, por ser claramente un club donde el que mejor está es el que llega a Primera", agregó.

Estudia inglés, complementa con el gimnasio, es un central lírico que a diario gana marca y carácter en su juego de campo como en el aéreo, pero que tiene una buena salida por el buen pie que maneja.

"Es un camino largo donde pasas muchas cosas, obviamente son muchos años donde hay mucho aprendizaje. Al principio más que nada es técnico que otra cosa, la táctica la vas aprendiendo, pero la física cuando llegas a Buenos Aires te vez con otro mundo donde conoces más que nada el gimnasio, lo que es otro ritmo de juego, clima, otras canchas y obviamente que eso te modifica", aseguró.

López de Munilla valora la devolución de los profes y la gente que conforma el fútbol formativo de Defensa y Justicia. "Dicen que estoy muy bien, en algunos partidos me felicitan. Y uno va sacando conclusiones, pero es día a día, porque en uno podés estar en tu pico más alto y al otro en el más bajo”., agregó con el convencimiento de que “el camino es largo”.

USMA, LA CASA QUE LO COBIJÓ Y LE DIO LA CHANCE DE LLEGAR A BUENOS AIRES

En vacaciones de invierno llegó a Comodoro Rivadavia, pasó la puerta del buffet del club y muchos escucharon una voz grave y un flaco de más de un 1.85m que saludó. Muchos se sorprendieron al verlo, pero "Juani" no escatima. "Es volver a donde todo comenzó".

"Es lindo volver a donde a uno siempre le gustó estar, un club que ama, que la verdad la pasé muy bien. Son lindos recuerdos por haber disfrutado cada entrenamiento, partido, el profe Abdul (Acosta) a quien le agradezco. Tuve un ratito donde jugamos con los profesores frente a “los más chiquitos de la escuela y regresé en el tiempo”, añoró con una sonrisa.

“Cuando entras te acordas de todo lo que pasaste, que te deja los mejores recuerdos, y volver es muy lindo, sobre todo, porque sigue la gente, y eso ayuda un montón", agregó.

Por último, el comodorense que vio a los Enzo Fernández, Lisandro Martínez con la camiseta del Halcón, sueña con debutar en Primera, sin perder el rumbo del crecimiento que le toca. 

“Es lindo ver que jugadores Campeones del Mundo pasaron por defensa. Es verdad que son dos, tres, entre millones, pero la verdad que a uno igualmente lo hace soñar en un camino largo donde tenés que persistir y aguantar. Obviamente entrenar y todavía yo creo que tenés que tener una pizca de suerte, como se dice, para llegar", reconoció.

“Mi viejo siempre me dice que cuando sea más grande veré el privilegio que tengo, más que nada, el poder estar, porque no muchos jugadores lo pueden decir y obviamente que igual es una responsabilidad para centrarte más en lo que es futbolista. Es lindo también porque uno está haciendo algo que te gusta y debo aprovechar, dimensionarlo y seguir soñando, sin perder el eje de mantener los pies en l atierra para soñar con llegar a Primera”, cerró.