El domingo pasado Rada Tilly enfrentó a Caleta Córdova en la villa balnearia y logró una victoria por 2 a 1. Con esta resultado, Caleta selló su descenso a la segunda categoría del fútbol comodorense.

Pero el dato de la jornada lo dejó Enzo Ortiz, un juvenil del “Aurinegro” que debutó con 13 años y que además le dio la victoria a su equipo. Esta noticia recorrió las páginas de toda la ciudad y la felicidad y orgullo de Rada Tilly.

Además, el fin de semana pasada Alejo Ruiz, jugador de la novena división de Stella Maris, pudo debutar en la máxima categoría de su club con solo 12 años de edad.

Ambas noticas generaron alegría en sus clubes, pero también salió a la luz cierto debate por la temprana edad a la que debutaron ambos chicos.

¿Es conveniente que nenes de novena división tengan roce con jugadores que duplican y hasta triplican en años? ¿Están físicamente desarrollados para tener choques con ellos? ¿Aceleran el proceso de crecimiento y formación?