El "Tigre" Saldivia recordó el combate con el "chino" Maidana y confesó cuál fue su mejor KO de su carrera
A seis años de su retiro del boxeo profesional, el ídolo de los guantes en la capital petrolera charló de todo en SetaTV. Su mejores peleas, su combate en el amateurismo con el "chino" Maidana, su primer día en el campo cuando comenzó en la industria petrolera y aseguró que sus cinturones estuvieron mucho tiempo en una bolsa debajo de la cama.
Héctor “Tigre” Saldivia ya no tiene el casette puesto de la época como boxeador. El último púgil comodorense que llenó estadios visitó Seta TV para charlar de todo un poco y repasar su carrera boxística donde cosechó nueve títulos antes de colgar los guantes en el 2018 luego de varios combates en el exterior.
El boxeador surgido en la escuela municipal del Gimnasio 1 sigue yendo a guantear cuando su trabajo en el rubro petrolero se lo permite. A veces pasa más de diez horas en el campo donde maneja un camión.
Los recuerdos de su palmarés están frescos en su memoria, y salvó uno o dos combates, Saldivia los recuerda con lujo de detalles. Sin dudas, pare el “Tigre” su mejor pelea fue el 6 de julio de 2006 cuando le ganó en el Socios Fundadores al chaqueño Raúl Bejarano y se adjudicó el cinturón argentino de la categoría Welter.
“Yo tenía un golpe que era mi favorito, era el golpe ascendente con el que gané la mayoría de los combates. Si analizas mis peleas, en la mayoría lo usaba. Contra Bejarano lo agarre dos veces, la primera en el quinto round y lo enganché justo en el ojo derecho y se lo abrí. Después en el último lo volví a enganchar justo en el ojo izquierdo. Ese día le hicieron doce puntos en el ojo derecho y nueve en el izquierdo. El Socios Fundadores estaba repleto, había quedado gente afuera”, recordó Saldivia.
A su vez, habló sobre los cinturones y aclaró que de los nueve que ganó, solo tiene cinco en su poder. “Solo tengo cinco, el Argentino Welter, el Superwelter, el OMB Latino, el Fedelatín, y el del Consejo Superwelter. Me faltaon cuatro que me los quedaron debiendo. Uno de ellos fue el que le gané a Sebastián Luján. En la foto me dieron uno similar pero no era el mío. Se lo pidieron a un chico, pero no era el mío. Se uso simbolícamente para la foto, pero nunca me llegó. El promotor lo tiene que comprar, pero a mí nunca me llegó. El Mundo Hispano también me lo quedaron debiedno. Una lástima”, confesó.
Hasta hace unos años, los cinturones estaban en una bolsa abajo de la cama de su hija, hasta que su señora Alejandro “China” Zamora lo motivó a que los cuelgue en una de las paredes de su casa.
En otro tramo de la charla confesó que la pelea más triste fue en el mítico Luna Park. "Sin dudas la más triste fue cuando pierdo el invicto en el Luna Park frente al ‘chino’ Miranda. Defendía mi título, y perdí. La venía ganando, pero me entró una mano en el pómulo derecho. En el rincón no podía apretar el bucal, y fue el hueso malar el que se me rompe ahí. Cuando salgo de nuevo, ya el árbitro no me dejó seguir por mi salud. Me quería morir”, recordó.