Eulalio “Coco” Muñoz: desde Gualjaina a Tokio
El atleta chubutense repasó su increíble historia de vida y contó las sensaciones de competir en un Juego Olímpico. “Hay días en los que me pregunto si será cierto esto que estoy viviendo o soy yo el que está loco y todos me dan la razón para no hacerme sentir mal", expresó Muñoz.
Son las 7 am y el sol recién empieza a asomar e iluminar la Pista de Atletismo de Esquel. Pero antes que el sol se levante sobre los cerros, hay alguien que ya está corriendo en este lugar. Cada mañana, Eulalio “Coco” Muñoz comienza con su primer turno de entrenamiento entre las 6 y las 6:30. “Es mi lugar de todos los días, acá es donde entreno hace 8 años”, nos asegura.
Todos los días, el atleta nacido en Gualjaina, madruga para hacer su primer turno, luego entra a trabajar y a las 18 vuelve a la Pista para el segundo turno de entrenamiento.
“Cuando se habla de llegar a un Juego Olímpico son muchas las cosas que uno tiene que vivir y pasar; con sacrificio, constancia y mucha disciplina. Pero sobre todo hay que tener en cuenta la actitud: A la hora de prepararse hay que tener actitud para superar malos momentos, o días de lluvia y viento y resulta necesario tener ese ímpetu para entrena”, explica Coco y, además, agrega: “Por eso estoy muy agradecido a mi entrenador que desde comencé siempre me llevó por ese camino, ya que creemos que la actitud es la clave del éxito a la hora de buscar un resultado”, expresó Muñoz a Chubut Deportes.
COMIENZOS EN EL ATLETISMO
A fines del 2011 Coco corre su primera carrera en Gualjaina, una prueba de 12K. “Competí porque la hacían en la escuela y me invitaron a correr. Yo la verdad que no me tenía mucha fe, ya que desconocía completamente el atletismo, pero sabía correr porque anteriormente jugaba al fútbol. Como me gustaba mantenerme en forma, más allá de que no siempre entrenábamos en grupo, a mí me gustaba salir a correr solo”.
Asimismo, cuenta que su vínculo con el atletismo llega desde mucho tiempo atrás: “Una linda anécdota que siempre me recuerda mi mamá es que cuando nosotros vivíamos en el campo a 13 km de Gualjaina y toda la familia iba caminando ya que no contábamos con auto. Entonces hacíamos 13km desde el campo y 13 más de vuelta hasta la casa; en total 26km que yo hacía casi corriendo por momentos porque como era el más chico, el resto de mi familia caminaba más rápido”.
En el año 2012 corrió (por equivocación) el Medio Maratón al Paraíso. Su idea era participar de los 5km y terminó compitiendo en los 21. Ahí fue donde conoció a Rodrigo Pelaez, su actual entrenador y gran amigo que lo ayudó a tomar la decisión que cambiará su vida.
“Tomé la decisión de mudarme de Gualjaina cuando decidí que quería para mi vida. En Gualjaina yo tenía todas las comodidades y lo que necesitaba: Allí tenía a mi familia, que para un chico de 16 años es lo que más desea. Lo que fue clave en ese momento para decidirme, también fue la actitud. Yo ni siquiera conocía Esquel, porque venía 2 o 3 veces al año a acompañar a mi papá nomas, y tomé la decisión de vivir acá con la ayuda de mi entrenador: Rodrigo me hizo entender que, si quería entrenar y competir en lo mejor del atletismo nacional, tenía que vivir en Esquel”.
Pelaez fue el primero en decirle (y convencer) a Coco que podía llegar a ser campeón argentino alguna vez y el atleta le respondió dándole plena confianza a su preparación. “Él era un formador de atletas de elite como lo son Karina Neipan, Martín Ñancucheo o Lalo Ríos; yo solamente lo escuchaba por la radio y me imaginaba estar en su lugar alguna vez”, recuerda Muñoz cuando nos cuenta que no sabe de dónde salió la confianza para pedirle que lo entrene allá en el 2012.
2019, EL AÑO QUE LO CAMBIÓ TODO
Si bien la idea de “Coco” era correr un maratón allá por el 2016, su entrenador no pensaba igual y le aseguraba que tenía que mejorar sus marcas para correr bien una distancia tan larga. Todavía me faltaba mejorar muchas cosas y llegar a ciertos números: “Gracias al trabajo duro en el 2018 pude llegar a esas marcas que me pedían (Eulalio corrió abajo de 1hora y 5minutos el medio maratón y menos de 30minutos los 10K); y Rodrigo me dijo ‘ahora estamos preparados para correr en una buena marca’.
Entonces el 2019 comenzó con un objetivo claro: Conseguir una marca para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. “La verdad es que yo no tenía mucha idea de cómo correr un maratón, nos habíamos puesto un objetivo que parecía tan grande, pero una vez que empezamos a entrenar encontramos buenas marcas”, cuenta Eulalio.
“Corrí 30 y 33km a 3:10, algo que era súper rápido para nosotros porque ningún atleta de la provincia corría con esos tiempos. Por suerte pudimos ir a Rotterdam, entrenamos en silencio, tratamos de hacer nuestro trabajo callados y cuando llegó la hora de competir pudimos correr en un muy buen tiempo”. En su primera presentación en un maratón de 42km, “Coco” consiguió un tiempo de 02:15:48 y el décimo lugar en el ranking argentino. “En su momento dijimos que está bien la marca que hicimos, pero no nos conformamos”, destaca y además agrega “Queríamos bajar esos 4 minutos que nos permitían llegar a la marca olímpica. Llegó Buenos Aires y dijimos ‘vamos por la marca’. No la conseguimos, pero pudimos mejorar 2 minutos más y quedamos a 50 segundos”.
La Maratón de Buenos Aires de 2019 será recordada por todo el deporte provincial. La imagen de Joaquín Arbe con la bandera argentina tras conseguir la marca para participar en un Juego Olímpico, sólo se pudo acrecentar al ver que detrás suyo llegaba otro chubutense. “Desde mi parte cuando cruzamos la línea final con la bandera argentina fue algo muy emocionante. Mi sueño siempre había sido estar en un podio Sudamericano. Si bien lo había conseguido cuando era Juvenil, no es lo mismo en la categoría Mayor. Sumado a eso, la emoción de ver que Joaquín, uno de los nuestros que ya estaba clasificado; fue algo muy lindo y a la vez motivante porque yo estaba solo a 50 segundos de la marca”. Muñoz terminó la Maratón de Buenos Aires con un tiempo de 02:12:23, el sueño estaba cada vez más cerca.
“Por suerte tengo un entrenador que no es nada conformista”, recuerda Eulalio. “Después de bajar del podio me dijo ‘hay que correr otro maratón’. Mi respuesta fue, pero terminamos de correr hace media hora; pero me animó asegurando que la marca estaba en mis piernas, sólo hay que trabajar para conseguirla”.
LLEGAR A TOKIO 2020
Luego de esa gran carrera se acercó mucha gente a ayudarlos, una de ellas fue Domingo Mazón que nos propuso una ayuda para ir a Valencia. “Desde que comencé a correr Chubut Deportes siempre me ha apoyado. Siempre me ha brindado una beca o una ayuda en todo lo que he necesitado. Por eso entre la ayuda de los dos pudimos realizar el viaje a Valencia”.
Pelaez tenía razón, la marca olímpica estaba en las piernas de Muñoz. El 1 de diciembre en Valencia “Coco” corrió a un ritmo más rápido, bajando unos segundos y consiguió la marca tan esperada de 2:11:23. “Ese 1° de diciembre fue uno de los días más felices de mi vida porque conseguí la marca tan ansiada que habíamos buscado durante todo el 2019 y ahora estamos a punto de que dos chubutenses participen en la misma disciplina en los Juegos Olímpicos”.
Ante el panorama mundial que se vive por la pandemia del Coronavirus, Eulalio guarda reparos ante la cita olímpica y entiende que hoy en día la prioridad es la salud. “Si se tiene que suspender que se suspenda porque es más importante la salud de todas las personas que los Juegos Olímpicos. Es el momento de ser un equipo y aceptar lo que viene. Si bien mi sueño es estar en los Juegos, creo que lo más importante siempre es la vida y la salud de todos. Hay que cuidarnos entre todos”, explica.
Sin embargo, el Comité Olímpico Internacional aún no ha suspendido o aplazado la cita olímpica en Tokio pautada entre el 24 de julio y el 9 de agosto. Esto le permite a Eulalio Muñoz, el chico de Gualjaina, que siga su sueño de estar en los Juegos Olímpicos: “Hay días en los que me pregunto si será cierto esto que estoy viviendo o soy yo el que está loco y todos me dan la razón para no hacerme sentir mal. Hay días que no caigo que voy a estar en un Juego Olímpico. Porque es algo que todo deportista quiere tener y son muy pocos los que lo consiguen. Decir que yo soy uno de esos pocos me pone muy feliz y orgulloso del trabajo realizado”.
Fuente: Chubut Deportes