El enfrentamiento entre Mauro Icardi y Wanda Nara alcanzó un punto crítico el viernes pasado, cuando el futbolista debía reencontrarse con sus hijas después de dos meses. La idea era que Francesca e Isabella pasaran 15 días con su padre como parte de la tenencia compartida, pero un inesperado giro desató el caos: al ver que las niñas llegaron con sus perros, Icardi reaccionó con furia y se dirigió a la casa de Wanda.

Lo que siguió fue un verdadero escándalo. Gritos, forcejeos, llantos y una situación de máxima tensión que terminó con la intervención de la policía y del SAME. Como resultado, no solo perdió la posibilidad de estar con sus hijas, sino que también sufrió otro golpe: la renuncia de sus tres abogadas, que decidieron dar un paso al costado tras ver cómo el futbolista arruinaba todo el trabajo que habían hecho para facilitar el reencuentro.

Las abogadas de Icardi lo abandonaron tras el escándalo

El episodio en la torre Chateau Libertador tuvo consecuencias inmediatas para Icardi. Elba Marcovecchio y Guadalupe Guerrero, integrantes de su equipo legal, decidieron dejar de representarlo debido a su desobediencia a las indicaciones que le habían dado. Luego de meses de trabajo para llegar a un acuerdo con Wanda, el futbolista echó todo por la borda con su reacción impulsiva.

A este drama familiar se sumó otro ingrediente explosivo: la China Suárez. Según trascendió, la actriz esperaba a Icardi con un asado para recibirlo junto a sus hijas, pese a que la Justicia había determinado que los encuentros debían darse sin la presencia de terceros.

X de 𝙇𝙪

En las últimas horas, desde la cuenta de El Ejército de LAM en X, se difundió un audio donde Lara, una de las abogadas de Icardi, reveló que le aconsejó alejarse de la actriz. "Le dije que sea inteligente, que la corra. La China ya está, se va a ir sola. Se lo dije yo: la mina era proporcionalmente linda como tóxica y puta… lo sabe todo el mundo”, disparó sin filtros.

Y agregó: “No es su novia, no es su pareja. A las chicas se la presenta como una amiga. Ella vive en Pilar con sus hijos, aunque se queda en su casa a veces. No creo que esto pase a mayores, pero cuanto más le dé, más se va a encaprichar él”.

El escándalo sigue escalando y todo indica que la guerra entre Wanda e Icardi está lejos de llegar a su fin.